Los Equipos de Prevención Integral de Incendios Forestales (EPRIF) están formados por personal experimentado que en época estival trabaja en extinción de incendios y cuya función principal en los meses fuera de la época de máximo riesgo es intervenir en el territorio sobre las causas que generan los incendios forestales. Cuando se habla de labores preventivas en los montes suelen entenderse únicamente los trabajos silvícolas realizados sobre el terreno; no obstante, la prevención de los incendios forestales debe ser integral, a fin de incidir en todo el abanico de causas y motivaciones de los siniestros. Los EPRIF se financian a través de la submedida 8.3 del Programa Nacional de Desarrollo Rural, mediante la que la Administración estatal competente en materia forestal, beneficiaria de las ayudas, encarga la contratación del personal y la gestión de los equipos a la empresa pública Tragsa. Los trabajos son planificados y desarrollados en función de la singularidad de cada zona y en coordinación con las administraciones autonómicas y locales, teniendo en cuenta la conciliación de las actuaciones con los intereses de los distintos colectivos del territorio. En este sentido, la sensibilización de la población rural es una estrategia clave. Por último, la profesionalización y continuidad del personal dedicado en la campaña de verano a la extinción, mantiene el empleo y es un aporte directo al objetivo de fijar población rural.