Todavía hoy los efectos de los productos farmacéuticos y de higiene personal (en conjunto conocidos como PPCP) sobre el medio ambiente y la salud humana no se conocen bien. Algo que se busca subsanar desde el recientemente creado Grupo Operativo Optagua, que buscará conseguir una reutilización del agua para aplicación de riego agrícola de forma segura para el cultivo y el consumidor final.
El Parlamento Europeo (PE) apoyó el pasado 13 de febrero, impulsar la reutilización de las aguas residuales tratadas para riego agrícola, con el fin de aliviar la escasez en las épocas de sequía. En particular, establece que las aguas residuales tratadas en instalaciones especializadas podrán utilizarse para todo tipo de riego agrícola, tanto de cultivos alimentarios como no alimentarios. La Comisión deberá evaluar en un plazo de cinco años si el agua regenerada puede tener otros usos.
Sin embargo, las aguas residuales que proceden de residuos urbanos, industriales, de agricultura y ganadería, etc., todavía presentan gran cantidad de compuestos cuya eliminación supone un grave problema. La mayoría de estos compuestos son de naturaleza orgánica, entre los cuales cabe destacar micro-contaminantes como los productos farmacéuticos o de cuidado personal, agrupados bajo la denominación PPCP por sus siglas en inglés.
Entrada de aguas residuales en la planta de tratamiento.
Alicia González Céspedes, investigadora de la Estación Experimental Cajamar.
Tratamiento terciario en la EDAR de Estella.
