Entre julio y octubre de 2019, las promotoras del proyecto Biela y Tierra realizaron un recorrido de casi 3.000 kilómetros en bicicleta con el objetivo de mostrar alternativas reales que se están desarrollando desde la agroeocología, la soberanía alimentaria y el ecofeminismo, para hacer frente a los retos ambientales y sociales ante los que nos encontramos, en el actual contexto de crisis sistémica. Para ello visitaron 125 iniciativas vinculadas a la alimentación sostenible y al mundo rural, priorizando aquellas lideradas o integradas por mujeres.
Antes de iniciar esta peculiar aventura, la pregunta “¿por qué los pueblos pierden población?” centraba las tertulias de sus protagonistas: Ana Santidrián, doctora en Ingeniería Química y Medio Ambiente, y Edurne Caballero, bióloga en el Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional, dos amigas que un día se preguntaron qué podrían hacer frente a ese problema.
Lo que comenzó como unas vacaciones se transformó en algo distinto cuanto entraron en escena Cristina Vázquez, diseñadora industrial, y Sole López, periodista, cofundadoras de LaDársena Estudio. Ellas terminaron de conformar este póker de reinas del mundo rural. Profesionales concienciadas con la comunicación honesta y el diseño responsable, lo tuvieron claro: esto hay que contarlo. Así nació “Biela y Tierra. Nuevas narrativas para la soberanía alimentaria”.
Los comienzos no fueron sencillos. Por delante, muchos meses de intenso trabajo. Había que darle forma al proyecto y buscar financiación. Lo cuenta Edurne Caballero: “Un amigo nos hizo un vídeo de promoción que tuvo muchísimas visualizaciones. Nos llegaban mensajes de gente rural, que nos invitaban a conocer su trabajo, y de urbanitas interesados en conocer esa realidad tan lejana”.
Edurne Caballero y Ana Santidrián, ante los mapas y el ordenador. El proyecto reclama también muchas horas de trabajo en gabinete.
Casi 3.000 km en ruta y 125 experiencias de producción sostenible visitadas constituyeron el primer año de andadura de Biela y Tierra.